Los fondos de agua son organizaciones que ofrecen un vehículo atractivo para movilizar recursos hacia la inversión rentable en las cuencas que proveen de agua a la ciudad, convocando a todos los diferentes actores para generar voluntad política y producir impactos positivos a escala, a través de acciones colectivas.

Un Fondo de Agua no solo protege fuentes hídricas estratégicas, si no que ofrece una estructura sólida, trazable y auditada para generar impacto medible. Gracias a su modelo de gobernanza colaborativa y su base científica, permite diseñar e implementar proyectos con resultados verificables, alineados con los marcos internacionales como los objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el Task Force on Climate-related Financial Disclosures (TCFD) y los estánderes ESG. Empresas e instituciones que invierten en un Fondo de Agua acceden a reportes periódicos, con indicadores de impacto ambiental, social y de gobernanza, lo que les permite demostrar compromiso real con la sostenibilidad, responder a sus obligaciones de reporte y fortalecer su reputación ante inversionistas, regulares y ciudadanía.